sábado, 30 de junio de 2012

ELENA VERA





PROFUNDO

Katia Chausheva (1953). Fotógrafa búlgara.



Lo sé
la soledad puede borrarme
Cada vez
pisas el límite
y
me cubro

Bajo tu mirada
estoy inerme

Temblando

No es tu presencia
sin embargo
lo que más temo


De Acrimonia (1981)



Elena Vera
(1939-1997). Poeta venezolana.


JOSÉ DE ESPRONCEDA




A UN RUISEÑOR


 
William. James Neatby (1860 – 1910). Artista Inglés. Nightingale, 1899      


      Canta en la noche, canta en la mañana,
      ruiseñor, en el bosque tus amores;
      canta, que llorará cuando tú llores
      el alba perlas en la flor temprana.

      Teñido el cielo de amaranto y grana,
      la brisa de la tarde entre las flores
      suspirará también a los rigores
      de tu amor triste y tu esperanza vana.

      Y en la noche serena, al puro rayo
      de la callada luna, tus cantares
      los ecos sonarán del bosque umbrío;

      y vertiendo dulcísimo desmayo
      cual bálsamo suave en mis pesares,
      endulzará tu acento el llanto mío.


 
José de Espronceda
(1808-1842). Poeta español.

viernes, 29 de junio de 2012

ARMANDO ROJAS GUARDIA

IV


 
Duane Michals (1932). Fotógrafo estadounidense.




     Para decir la ausencia del poema,

     su centrífugo ardor sobre mi espalda

     planto el texto como un cero,

     una sola cifra invertebrada

     donde este silencio que me ahueca

     rebota en las palabras por instantes

     y permanece intacto.

     ¿Por qué insiste la letra minuciosa

     en tercas servilletas, en cuadernos,

     en papeles mugrientos y fugaces?

     Sólo sé que al huir deja el poema

     un rastro de fiebre que pulula

     en los labios inmóviles, esta huella muda

     empeñándose  aquí, sobre la página.





De: La nada vigilante (1994)





Armando Rojas Guardia
(1949). Poeta venezolano.

FERNANDO PAZ CASTILLO












jueves, 28 de junio de 2012

JOSÉ DE LA FUENTE


A PESAR DE TODO

Michael & Inessa Garmash. Pintores croatas. Lost in lilies





     Entre el vértigo y la duda
     me quedo contigo

     Tu olor desnuda árboles y santos
     el mundo se da por vencido con un beso

     Al ruido de las aguas
     recorrer con las manos y la boca
     esa topografía de montañas y raíces

     Tu manera de abrazar me libera del otoño
     se desata en la unidad el sueño de la muerte
     en tus nalgas se poliniza el despertar

     Si no fuera por las formas
     no podríamos experimentar nuestros deseos
     las pasiones se quedarían sin ganas

     Tus caderas siguen el camino obligatorio
     del ombligo hacia el pubis nadie retrocede
     la única respuesta está en el movimiento

     En tus ojos
     la única región más celeste del mundo




José de la Fuente
(1946). Poeta chileno.


Texto tomado del libro “La poesía erótica en Chile”. Gustavo Donoso &Luis Opazo. Editorial LOM, Colecciones entre mares.

ELIZABETH SCHÖN




Ángel Diego /(1956). Fotógrafo español.





Del alma frente al oscuramente árbol
queda apenas un brío de asombros
con la lámpara
para descubrir lo que antes nos fue invisible
y sentir lo que llega
cuando la finita claridad comienza a ser
interioridad nuestra
infinita



De Árbol del oscuro acercamiento (1992)


Elizabeth Schön
(Caracas, 1921 – 2007). Poeta venezolana.

miércoles, 27 de junio de 2012

FAUSTO IZCARAY


56



Dora Maar, seudonimo de Henriette Theodora Markovitch (1907 - 1997). Fotógrafa francesa. Autorretrato.





Tu voz
te representa
en la distancia.
Mas no alcanza
a rellenar
todo el espacio
que ocupas
en mi.

Mi memoria
reclama el volumen
de tu presencia.



De: Voces de mi laberinto (2004)
                                         


Fausto Izcaray
(Barquisimeto, 1945). Poeta venezolano.

NERVYS ARRIAGA LAYA










ANTONIO RAMOS ROSA



LA IMAGEN QUE CONDUCE AL CUERPO


Francesca Wodman (1958-1981). Fotógrafa estadounidense. Untitled, New York, 1979-1980



La mano dispersa en el follaje
la mano perdida la boca ya exhausta
¿dónde tocar la piedra las sílabas de piedra?

Aquí una sombra blanca No la inicial
Este inhabitable lugar no es centro ni principio
¿Cómo alcanzar el corazón de algo
la sustancia el centro o la tierra del poema?

Comienzo sin amor siempre demasiado temprano
No interrogo a un insecto ni a una piedra
Recorro un muro con una mirada ciega
Estoy tan lejos de la realidad como del poema
La distancia es infinita Tú no estás aquí
Y no soy yo pero aún soy yo Todo es de menos
y de más

La mano toca no un silencio no las sílabas
de un cuerpo largo y grueso sino una corriente
congelada una pared árida calcinada

¿Cómo encontrar la imagen que conduce al cuerpo
cómo recorrer las venas vivas del silencio
y hacerte estremecer los finos labios?
¿Cómo estar siendo ser estando
junto a la boca unida y firme
y trémula
del poema?

Si supiera dibujar las líneas negras
que abren la completa blancura
del cuerpo
que dejan entrever la espuma en los cabellos
en el surco que divide las amorosas piernas
donde permanece el murmullo de la sangre bajo las manos
¿escribiría las líneas intensas del poema?

Las manos se completarían en el perfil ardiente
El presente sería el instante del refugio inmenso
La luz de tus ojos bañaría las palabras
y tú serías el cuerpo luminoso
con los miembros liberados bajo el agua viva

¿Escribir sería amarte? ¿Sería
interrumpir este desierto limpiar la herida abierta?
¿Sería entrar al interior del centro fresco
recorrer esa playa que nadie aún ha pisado
besar tus huellas y la límpida sed
que dibuja toda la alta llama de tu cuerpo?



Traducción: Eugenio Montejo



De Lámpara con algunos insectos



 
Antonio Ramos Rosa
(Faro, Portugal, 1924) Poeta portugués.


lunes, 25 de junio de 2012

RAFAEL PINEDA



SOLEDAD  CONTIGUA


 
Cole Thompson (1956). Fotografo estadounidense. 




          Por sorpresa se adueña del cuerpo
     la soledad, como del fuego la ceniza.
          Después del primer sorbo, otra esperanza
     estremece los sentidos que transitan
          por raíces de oro, casi en el espejismo.
     Rostros desconocidos y fieles habitan
          este misterio. El fervor hambriento se levanta
     con las hojas,  el viento y las golondrinas.
          Creemos que la sangre viene desde el mar.
     La razón crece en quietud, en altas espigas;
          despliegan recias alas, escucha. Es menos
     libre, más transparente en heroísmo, la vida.
          Una rara dulzura agota los pasos. De pronto,
     como un brote de rosas, reaparece la agonía.




De: El Resplandor de las Palabras



Rafael Pineda
(1926 - 2010). Poeta venezolano.