sábado, 22 de junio de 2013

GUILLERMO SUCRE



EL REGRESO

 
Héctor Poleo (Caracas, 1918-1989). Pintor, dibujante, grabador y muralista venezolano. S/t





Ya es hora de volver a casa de la Dama blanca,
                que me espera para contarnos
nuestros sueños o nuestras vidas.
Llego y ella me recibe como sofocada por el aire
                caliente del mediodía.
Esos terrones rojos y duros que nunca he podido
                amar—me dice, sacudiéndose las palabras
antes de estrechar los cuerpos tan dulcemente
como los labios—
y se va al traspatio de la parra que sus manos
cuidaron en la fidelidad.
Entonces, luminosa, la veo preparar como para
                una libación, el licor que purifica
                y sacia la sed del viaje.
Ella lo sabe: «es el sueño que soñó tu mujer
y ahora tú sueñas».
La ciudad de piedra y el río, toda esa larga
generación de lutos o de júbilos
que es nuestra memoria,
reverbera.
Al atardecer, cuando las aguas atormentadas por el último
destello, por el último destello, se resignan a la noche,
celebraremos el amor.
Esa pureza en el corazón—ambos reconocemos—
que es el amor, esa cascada en la que dos seres
                se bañan y entrelazan, que es el amor;
la atraviesan y aun el vértigo del raudal más furioso
                será el amor.
Nos damos la mano y andamos por los malecones;
el halo de la luna parece el hálito de la tierra
y ya sabemos que ese paisaje ya no será nuestro,
                que apenas le pertenecemos.
Llenos de noche, nos hacemos noche.
Volvemos al licor que va libando la tierra, esa otra sed
                en la que ninguna boca se sacia.







 
Fotografía Lisbeth Salas

Guillermo Sucre
(Tumeremo, estado Bolívar, 15 de mayo de 1933).  Poeta, traductor y crítico literario venezolano.


Texto tomado de la revista El Puente.  Septiembre de 2003 / N° 0


No hay comentarios: