EN EL PRINCIPIO
En el principio fue la
estrella de tres puntas
Una sonrisa de luz a
través del rostro vacío;
Una rama de hueso a
través del aire enraizante,
La sustancia bifurcada
que meduló el primer sol;
Y, cifras ardientes en
el redondel del espacio,
El cielo y el infierno
se mezclaron al girar.
En el principio fue la
pálida firma,
Trisilábica y estelar
como la sonrisa;
Después vinieron las
huellas sobre el agua,
El sello del rostro
estampado en la luna;
La sangre que salpicó
el árbol y el grial
Salpicó la primera nube
y legó un signo.
En el principio fue el
fuego ascendente
Que abrasó los climas
con una chispa,
Una chispa ojiroja, de
tres ojos, clara como flor;
La vida brotó a chorros
desde los mares revueltos,
Reventó en las raíces,
bombeó desde la tierra y las rocas
Los aceites secretos
que impulsan el pasto.
En el principio fue el
verbo, el verbo
Que de las sólidas
bases de la luz
Abstrajo el abecedario
completo del vacío;
Y desde las bases
nubladas del aliento
Fluyó el verbo,
traduciendo al corazón
Los primeros caracteres
de muerte y nacimiento.
En el principio fue el
cerebro secreto
Con sus células
soldadas al pensamiento
Antes de que las venas
vibraran en sus mallas
Antes de que la
oscuridad total se bifurcara rumbo al sol
Y la sangre salpicada
derramara a los vientos de la luz
El costillar originario
del amor.
(Traducción: John Dickinson y Gabriel Rodríguez)
Dylan Thomas
(Swansea, Gales, 27 de octubre de
1914 – Nueva York,9 de noviembre de 1953) fue un poeta, escritor de cuentos y
dramaturgo galés.
No hay comentarios:
Publicar un comentario