EL HOMBRE Y EL MAR
Hombre libre, tú siempre elegirás el mar.
Reconoces tu alma, porque el mar es tu
espejo,
mirando al infinito arrastre de las olas:
tu espíritu es también un foso amargo y
negro.
Te gusta zambullirte sobre tu viva imagen;
la abrazas con los ojos y los brazos:
adentro,
tu corazón se olvida de sus propios
latidos,
al rumor de ese bronco y salvaje lamento.
Hombre, nadie ha llegado al fondo de tu
abismo,
turbio, como en el mar, de tiniebla y
misterio;
oh mar, nadie conoce tus íntimas riquezas,
de tal modo celáis los dos vuestros
secretos.
Hace ya, sin embargo, siglos innumerables
que os batís sin piedad y sin
remordimiento;
de tal modo os atraen el horror y la
muerte,
oh hermanos implacables, luchadores
eternos.
Traducción: Esteban
Torre
Charles Baudelaire
(1821-1867). Poeta francés.
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